El Centro Nacional de Investigación y Almacenamiento de la Energía se instalará sobre una superficie de 120.000 metros cuadrados y constará de tres edificios: el principal, la planta piloto de infraestructura científica y técnica y la incubadora. El centro, que contará con un presupuesto de 70 millones de euros (34 de los cuales ya están incluidos en los presupuestos generales del Estado para este año), será erigido en unos terrenos cedidos por la Diputación Provincial de Cáceres, en la finca El Cuartillo, en una zona próxima al campus de la Universidad de Extremadura y el Hospital Universitario de Cáceres. La nueva infraestructura científica, que está previsto sea inaugurada en 2023, servirá para investigar formas más eficientes de almacenamiento energético, desde la creación de hidrógeno y su transporte hasta las tecnologías de baterías emergentes.
La Junta y el Ejecutivo central quieren convertirlo además en un "polo de atracción" de industrias y científicos y están trabajando además en la posibilidad de incorporar a Portugal en este proyecto: “un componente transfronterizo –ha dicho Fernández Vara- que aquí entendemos muy bien”. El presidente extremeño ha anunciado también que se le ha encargado a Parque Científico y Tecnológico de Extremadura iniciar los “primeros pasos” en este proyecto que “para nosotros es absolutamente estratégico”.